INDIA.- Shri Ashutosh Maharaj , fundador de la orden religiosa Divya Jyoti Jagrati Sansthan , habría muerto en enero, según declaraciones de su esposa y su hijos. Sus familiares quieren cremar al líder espiritual pero sus seguidores aseguran que se encuentra en estado de meditación. Ante esta duda, una Corte de India decidirá si el gurú está muerto omeditando.
Mientras los seguidores lo han colocado en un congelador comercial para mantener su cuerpo en bien preservado para cuando él despierte, su esposa e hijo han llenado una petición legal, pidiendo una investigación sobre las circunstancias de su muerte, y para la liberación de su cuerpo. Ellos dijeron que los seguidores de la secta mantienen los restos del líder espiritual para mantener el control de sus bienes.
Los médicos declararon al gurú clínicamente muerto, al parecer debido a un paro cardíaco.La policía de Punjab también confirmó su muerte, pero curiosamente el Tribunal Superior de esa provincia desestimó luego el informe policial y los funcionarios del gobierno local decidieron que la disputa entre quienes dicen que Maharaj está vivo y los que opinan lo contrario, era un asunto espiritual.
Dilip Jha , hijo del religioso, cree que los seguidores de su padre tienen razones muy poco espirituales para negar su muerte, y los acusa de mantenerlo "vivo" para perpetuar el control sobre los asuntos financieros del líder espiritual. El movimiento religioso -que Maharaj liderara durante décadas- posee unos 160 millones de dólares sólo en bienes inmobiliarios.
Mientras los seguidores lo han colocado en un congelador comercial para mantener su cuerpo en bien preservado para cuando él despierte, su esposa e hijo han llenado una petición legal, pidiendo una investigación sobre las circunstancias de su muerte, y para la liberación de su cuerpo. Ellos dijeron que los seguidores de la secta mantienen los restos del líder espiritual para mantener el control de sus bienes.
Los médicos declararon al gurú clínicamente muerto, al parecer debido a un paro cardíaco.La policía de Punjab también confirmó su muerte, pero curiosamente el Tribunal Superior de esa provincia desestimó luego el informe policial y los funcionarios del gobierno local decidieron que la disputa entre quienes dicen que Maharaj está vivo y los que opinan lo contrario, era un asunto espiritual.
Dilip Jha , hijo del religioso, cree que los seguidores de su padre tienen razones muy poco espirituales para negar su muerte, y los acusa de mantenerlo "vivo" para perpetuar el control sobre los asuntos financieros del líder espiritual. El movimiento religioso -que Maharaj liderara durante décadas- posee unos 160 millones de dólares sólo en bienes inmobiliarios.
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