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La Policía alemana investiga el caso de un hombre de 43 años de edad que al parecer fue confinado en la casa de sus padres alrededor de tres décadas en un pequeño municipio cercano a la ciudad germana de Bayreuth (Baviera), informa Deutsche Welle. Por ahora se sabe que las autoridades no ven en el misterioso confinamiento de este varón delito alguno, sino una trágica situación familiar.
El hombre no ha pisado las calles del pueblo desde que dejó de ir a la escuela a la edad de 13 años. Documentos de aquella época confirman que las autoridades escolares decidieron que el niño no podía asistir a clase.
Las autoridades han admitido que es posible que no se presentarán cargos contra los padres del individuo. "Él mismo dejó de querer salir más", afirma su madre. A su juicio, nadie lo encerró en la vivienda y su marido y ella solo querían protegerlo."No sabemos exactamente cuánto tiempo vivió allí sin contacto regular con el mundo exterior. Tampoco conocemos si tuvo o no la oportunidad de salir de casa", admite un portavoz policial. El hombre pudo haber vivido aislado en su casa durante 20 o 30 años, sugiere este vocero.
El citado ciudadano bávaro se encuentra ahora ingresado en un hospital, que ha informado de que su estado "el que deberíamos esperar en tales circunstancias", aunque el individuo no muestra signos de malnutrición. Su nombre no ha sido revelado debido a las estrictas leyes germanas en el ámbito de la protección de la privacidad.
Muchos se preguntan hoy en Alemania cómo una persona pudo desaparecer de la vida civil durante tantas décadas sin que las autoridades no se dieran cuenta.
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