Un agente efectúa los disparos sólo pocos segundos después de dar la voz de alto y sin apenas bajar del coche patrulla en el que se encuentran.
La Policía de Cleveland reveló públicamente audio y video del momento impactante cuando un niño de 12 años fue abatido por oficiales. Las autoridades de Cleveland han dado a conocer un video de vigilancia sobre la muerte a tiros de un niño de 12 años, que resultó llevar una pistola de juguete.
Varios medios de comunicación se hacen eco de esta noticia que ha saltado en las últimas horas y que ha pillado por sorpresa a más de uno. Su relevancia es evidente.
Y por ello la repercusión se está extendiendo más allá del ámbito cercano a los protagonistas de la información, en tanto que ha sido bastante difundida.
La policía de Cleveland (Ohio) ha dado a conocer un vídeo en el que se ve cómo dos de sus agentes disparan contra un niño negro de 12 años que portaba un arma de juguete, suceso que ha conmocionado a todo Estados Unidos por su crueldad.
Un agente efectúa los disparos sólo pocos segundos después de dar la voz de alto y sin apenas bajar del coche patrulla en el que se encuentran.
La policía de Cleveland ha revelado que el vídeo fue grabado por una cámara de seguridad en la acera de enfrente del parque por el que paseaba, jugando, Tamir Rice el pasado sábado 22 de noviembre.
Tras el fallecimiento del pequeño, sus padres, Samaria Rice y Leonard Wamer, exigieron a la policía la difusión del vídeo en una carta abierta, en la que señalaban que “creemos que las acciones del agente de policía que quitó la vida nuestro hijo tienen que hacerse públicas. Aunque nos hiere dolorosa, indescriptiblemente, aún tenemos fe en el sistema de justicia”.
Añaden que el vídeo "muestra claramente una cosa: los policías actuaron muy rápido y su muerte se podía haber evitado".
Por su parte, la policía, que mantiene la tesis de que los agentes creyeron que el arma era auténtica, dio a conocer los nombres de los agentes: Timothy Loehmann, de 26 años, y Frank Garmback, de 46.
Se ha conocido que Loehmann fue el autor de los disparos, después de dar el alto al chico desde la ventanilla del coche patrulla.
Como era de esperar, el incidente generó una ola de protestas en Cleveland, donde la fiscalía está investigando a los policías que mataron al chico.
Mientras tanto, las reacciones se siguen sucediendo en todos los ámbitos de la sociedad a la espera de que la actualidad ubique la información en un segundo plano.
Varios medios de comunicación se hacen eco de esta noticia que ha saltado en las últimas horas y que ha pillado por sorpresa a más de uno. Su relevancia es evidente.
Y por ello la repercusión se está extendiendo más allá del ámbito cercano a los protagonistas de la información, en tanto que ha sido bastante difundida.
La policía de Cleveland (Ohio) ha dado a conocer un vídeo en el que se ve cómo dos de sus agentes disparan contra un niño negro de 12 años que portaba un arma de juguete, suceso que ha conmocionado a todo Estados Unidos por su crueldad.
Un agente efectúa los disparos sólo pocos segundos después de dar la voz de alto y sin apenas bajar del coche patrulla en el que se encuentran.
La policía de Cleveland ha revelado que el vídeo fue grabado por una cámara de seguridad en la acera de enfrente del parque por el que paseaba, jugando, Tamir Rice el pasado sábado 22 de noviembre.
Tras el fallecimiento del pequeño, sus padres, Samaria Rice y Leonard Wamer, exigieron a la policía la difusión del vídeo en una carta abierta, en la que señalaban que “creemos que las acciones del agente de policía que quitó la vida nuestro hijo tienen que hacerse públicas. Aunque nos hiere dolorosa, indescriptiblemente, aún tenemos fe en el sistema de justicia”.
Añaden que el vídeo "muestra claramente una cosa: los policías actuaron muy rápido y su muerte se podía haber evitado".
Por su parte, la policía, que mantiene la tesis de que los agentes creyeron que el arma era auténtica, dio a conocer los nombres de los agentes: Timothy Loehmann, de 26 años, y Frank Garmback, de 46.
Se ha conocido que Loehmann fue el autor de los disparos, después de dar el alto al chico desde la ventanilla del coche patrulla.
Como era de esperar, el incidente generó una ola de protestas en Cleveland, donde la fiscalía está investigando a los policías que mataron al chico.
Mientras tanto, las reacciones se siguen sucediendo en todos los ámbitos de la sociedad a la espera de que la actualidad ubique la información en un segundo plano.
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