Plano del proyecto |
Los documentos que entregó a la U.N.A. son una ilustración gráfica del generador, y las fotocopias de unas tres de hojas de cuaderno cuadriculadas en las que este soldador industrial y mecánico anotó a mano las instrucciones para la fabricación del mismo y el procedimiento para unirlo al motor de la motocicleta.
Vaesken dijo que no busca retribución económica por su invento, sino que lo que quiere es poder ayudar a los científicos a poder desarrollar un combustible muchos más limpio y económico. De última, lo que aceptaría es una beca de la UNA para poder estudiar Química.
Hoy se está regando la noticia del muchacho a través del Facebook y el Twitter, la gente asegura que el propio Vaesken puso a prueba el rendimiento de su motocicleta, funcionando a agua con un viaje desde Villarrica hasta San Juan Bautista (Misiones) –un recorrido de cerca de 250 kilómetros– y desde San Juan hasta Asunción –200 kilómetros– con nada menos que unos 8 litros de agua.
Además, los más precavidos (o paranoicos según el punto de vista) siquen diciendo que es muy peligroso lo que hace, porque se estaría metiendo con los grandes capos petroleros, lo cual podría ser peligroso para su integridad física.
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Fuente: cronica-py
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