“Sentí que algo me mordía”, aseguró Helen Richards de Chapel Hill, Queensland, Australia, que tras sentir el mordisco se levantó y observó horrorizada que se trataba de una serpiente pitón que intentaba salir de su inodoro.
La mujer sólo pudo encender la luz del cuarto de baño. “Cuando tienes los pantalones en las rodillas es difícil escapar a cualquier sitio”, comentó Richards a ‘10 News’.
Posteriormente, la mujer hizo una foto del reptil y consiguió bajar la tapa del retrete sobre la que acopió sartenes y ollas para mantenerla cerrada.
Se puso en contacto con Snake Catchers Brisbane, una empresa especializada en capturar este tipo de reptiles y un técnico con atrapó al animal.
La picadura de la pitón no era venenosa y fue tratada con un spray antiséptico.
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