ESTADOS UNIDOS - Un hombre podría pasar el resto de su vida en la cárcel por lo que le ponía al café con leche de su jefa. La decisión está en manos de la Justicia.
En los últimos días se conoció la mala leche de un empleado, que siempre le acercaba a su jefa un café con leche. El problema era uno de los "ingredientes" que utilizaba para preparar la bebida.
Lewis Williams confesó su incalificable delito delante de 12 personas y ahora se enfrenta a una pena de más de 1.000 años de prisión.El hombre, que era trabajador de una empresa de ingeniería de Newark (Estados Unidos), fue detenido luego de admitir que durante los últimos cuatro años adoptó la nauseabunda costumbre de eyacular en el café de su jefa.
Luego de una fuerte discusión, el propio Lewis confesó el delito a su jefa, Linda Moore, con quien evidentemente no se llevaba nada bien. El acusado era el asistente de Moore y le entre sus tareas figuraba la de llevarle diariamente el café.
La discusión en la que confesó su insana costumbre se produjo delante de no menos de 12 testigos. "En cientos de ocasiones", fue una de las frases que dio prueba de que no fue un hecho aislado. Ahora, el acusado se enfrenta a una pena de nada menos que 1.070 años de cárcel por 860 delitos de abuso sexual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
No se permiten comentarios ofensivos, discriminatorios o racistas. Serán moderados. Gracias por su opinión.