De vagabundo y adicto a las drogas a un exitoso millonario

Hay historias que son verdaderos ejemplos de superación

ESTADOS UNIDOS - Y es que algunas veces, el ser humano es capaz de salir de la crisis más profunda de su vida y renacer. Todo ello gracias a la resiliencia, una capacidad del ser humano que te permite superar circunstancias traumáticas y revertirlas de una forma positiva. Esto fue lo que pasó exactamente con el protagonista de la historia: ¡Increíble! De vagabundo y adicto a las drogas a un exitoso millonario.

Khalil Rafati era un hombre que hace 13 años atrás llegó de su ciudad natal a vivir en Los Ángeles. Tuvo una infancia bastante trágica marcada por el abuso y, luego que su madre muriera, pensaba que ya no tenía nada más que hacer en su lugar de origen y decidió irse de allí.

Pero Khalil no sabía que todo lo que le había sucedido le podía significar una terrible depresión, lo que sería un factor primordial en su adicción a las drogas. Cuando en un comienzo arribó a Los Ángeles, pareciera que todo iba bien con él. Comercializaba automóviles deportivos y ganaba dinero para solventarse. Sin embargo, luego comenzó a involucrarse con las drogas y empezó a vender marihuana.

Él también probaba las sustancias y todo comenzó a empeorar cuando probó la heroína. La droga lo hacía sentir increíblemente bien y eso significó que abusara más de la cuenta. Rafati empezó a tocar fondo, pesaba tan sólo 48 kilos y casi murió encerrado en su baño cuando desconocidos intentaron balearlo al interior de su pequeño apartamento.

Este chico, en poco tiempo, llegó a la cárcel; no tenía casa, no tenía dinero y sintió que ya había tocado fondo. Su cara estaba ulcerada, lucía muy delgado y si no paraba su estilo de vida ahora mismo, en cualquier momento podría morir. Y así fue que empezó a concentrarse en su salud y sobriedad.

Un amigo le mostró unos jugos saludables y orgánicos que harían un gran efecto para las personas que se recuperaban de las drogas. Se entusiasmó y empezó a prepararlos. En primera instancia, se los entregaba a sus compañeros del centro de rehabilitación de Malibú en el que se encontraba y luego, sus jugos alcanzaron fama. Iba gente de todos lados a pedir los jugos a Khalil y en ese momento, supo que tenía que armar un negocio con ello.

Así fundó "Sunlife Organics” y con el lema "amarar, sanar e inspirar” vende todo tipo de jugos, batidos de proteínas, smoothies, sundaes, entre otros productos. Es tanta su popularidad que incluso famosos, como Anthony Kiedis y David Duchovny son fans de su negocio.